Texto: Javier Carrillo
Continente que tiene de todo, Europa es una invitación a los placeres que se desprenden de su gran diversidad de culturas, de sus raíces, de su historia, de ofrecer maravillosos paisajes e imborrables recuerdos que se llevan de regreso en las maletas. Urbes llenas de tradición han dado forma a una gran influencia en todo el mundo en todos los aspectos del arte, la gastronomía y la cultura, y a la vez se mantienen como unas de las más atractivas metrópolis por su encanto muy particular. Su arquitectura, sus plazas, sus calles, sus museos, sus parques, sus palacios, sus lugares típicos, sus iglesias y catedrales, los artistas y el importante acervo cultural que resguarda y los que siguen creando, escenarios que han sido trascendentales en el curso de la historia, además de bellezas naturales como ríos, bosque, lagos y montañas que cada región tiene para ofrecer. Toma un paseo por Londres, Brujas, Bruselas, Ámsterdam, Zurich, Frankfurt, Berna, Ginebra, Lyon y París, junto con algunos hermosos puntos turísticos intermedios, y vive, respira y enamórate de los aires de tradición, elegancia y clase, en un conjunto de ciudades tan eclécticas y maravillosas como sólo Europa es capaz de prodigar a sus visitantes.